Escribía hace unos pocos meses un post sobre Tarifas de risa para proyectos serios. Comentaba que uno de los aspectos más negativos en mi vuelta al lado digital, era que el mercado continuaba presionando proyectos con precios por debajo de su coste real.
Hoy sigo mostrando idéntica sorpresa y preocupación. No acabo de acostumbrarme. Con todo, lo peor no es eso. Lo casi escalofriante es la inflación salarial que se está produciendo.
Profesionales con perfiles medios, que reciben día sí y día también, ofertas desproporcionadas a la posición, responsabilidad y experiencia del interesado. No se trata de hechos aislados. Digamos que se trata más bien de una situación estructural, más que coyuntural.
¿Razones? Es un mercado que crece. Muchas compañías crean nuevos departamentos o los dimensionan. Las compañías de servicios como nosotros, incrementamos plantilla. Los que no estaban, intentan entrar al precio que sea… Todo esto unido a un déficit clarísimo de talento y formación. Hay poca oferta de formación especializada, y de nivel todavía menos.
Empieza a recodarme a aquellos episodios pasados de locura.com. Tampoco no soy demasiado optimista respecto al futuro inmediato. Con el IPC desbocado, los presagios no invitan al optimismo. De hecho no creo que ni una -no deseada- desacelaración pueda hacer cambiar el panorama. Los buenos profesionales son muy apreciados, y aún más en tiempos difíciles.
Puede que mis palabras cosechen rechazo entre aquellos que disfrutan (y ganan) especulando con su sueldo. Están en su derecho, pero con el tiempo aprendes que fichar a alguien sólo por dinero, es un error. Al final se vuelve en tu contra.
En cambio me parece bien y lógico, competir para atraer talento. No es una contradicción, porque eso forma parte del negocio en si mismo. Tienen que ganar los mejores. Esta es una actividad de talento, es eso lo que marca la diferencia. Quien consigue atraerlo, motivarlo y retenerlo, gana.
Pero estaría bien que no inflacionáramos artificialmente los sueldos. Podría entenderlo para fichar una posición concreta y “estratégica”… pero ¿qué sentido tiene cuando sucede incluso con los juniors?
¿De verdad que es esta la industria que deseamos?