Esta semana, en dos contextos profesionales diferentes me han comentado proyectos relacionados con mundos virtuales o persistentes. Admito que de entrada me producen un ligero escepticismo, tal como manifestaba en un post anterior acerca del seguidismo publicitario a la moda Second Life.
Me temo que actualmente, a lo máximo a que se puede aspirar es al efecto noticia de explicar en los medios una presencia más o menos estructurada… Y por supuesto, si algún día se demuestra lo contrario no me importará rectificar y admitir mi error…
Con esto no menosprecio a las comunidades-mundos virtuales como alternativas válidas de entretenimiento, al contrario. De la misma forma que veo su validez como canal de comunicación entre una marca y sus clientes, siempre que se demuestre la idoneidad (rentabilidad), de la misma forma que se miden y exigen a otros puntos de contactos entre cliente-marca.
El ocio –y sin duda el digital- insiste cada vez más en la creación de experiencias interactivas lo más reales posibles. Buscando involucrar al usuario, intentando recrear unas relaciones sociales creíbles, con personajes reales o ficticios en unas situaciones concretas que dinamizan y dan sentido a ese mundo.
Las comunidades virtuales a modo de mundos persistentes tienen futuro, pero a la escala que les corresponde. Dos datos según Gartner. El primero afirma que una mayoría los heavy users activos tienen tendencia a crearse un alter ego digital, aunque no sea en SL, y sea en World Of Warcraft, en Habbo Hotel o en otros mundos virtuales.
En el mismo informe se atreven a cifrar en 60 millones, el número de usuarios activos en algunas de estas comunidades previsto para el …2011!!. Número muy respetable, pero muy lejos de los mil millones de usuarios que ya tienen Internet en la actualidad.
No obstante, este problema de masa crítica, se puede convertir en una oportunidad si se trata de comunidades-nicho, de alto valor y con perfiles muy cualificados…
Por tanto, entendiendo que el objetivo del usuario es entretenerse, jugar, interactuar (ahora mismo en SL eso ya me plantea dudas) y que el objetivo del anunciante, tiene que estar basado en criterios de rentabilidad, veo exceso de optimismo y unas expectativas desbordadas ¿o no?