Dice Michel Reilhac, Director Ejecutivo de ARTE France Cinéma que “El cine y la televisión están llegando al final del ciclo, como formas dominantes de la narración en el mercado. La relación con el público necesita ser completamente reinventada”. Y una de las consecuencias de todo esto es que la industria audiovisual, está obligada a metamorfosearse, quiera o no quiera. Aunque la industria audiovisual no es una democracia, el público es soberano porque es el que –de una forma u otra- paga.
Inspirado por el artículo de Reilhac (‘Transmedia as a state of mind’) me he decidido a adaptarlo a la realidad de las webseries, como uno de los primeros escalones del nuevo universo transmediático.
1. Espíritu de colaboración. Hay que cambiar de hábitos. Aunque suene a naïf, hoy y especialmente mañana, no se compite, fundamentalmente se colabora.
2. Céntrate en la historia, no en los gadgets. Hay que perder la fascinación por los trucos nuevos y dispositivos que siguen apareciendo. Perder el miedo a no estar al día con los geeks. Utilizamos dispositivos tecnológicos para contar nuestras historias, que tienden a mezclarse, en una mashup con redes, interacciones, interfaces…. No te quedes fascinado por los aspectos tecnológicos de las cosas. La tecnología cambia, pero las necesidades siguen siendo las mismas.
3. La jugabilidad. El juego no debe ser visto como un enemigo. Puede ser un excelente socio para los que vienen del mundo de la narración.
4. La confianza no se gestiona, se gana. Hay que buscar compromiso con el usuario. Para activar la participación hay que ser totalmente sincero y honesto.
5. Es una comunidad. La relación entre las conexiones sociales y la narración está creciendo de forma exponencial, hasta el punto que la comunidad tiene que ser el motor de la webserie. El público comparte y embellece las historias. Nos encanta contar y escuchar historias.
6. Es el principio, no el final. La webserie, dentro de un universo transmediático, ya no es el final de un proceso cíclico corto, sólo es el principio. ¿El inicio de una franquicia transmediática? La webserie debe intentar trascender a la webserie. La webserie puede ser un potente vehículo para la interacción social, si eso es así, trascenderá más allá de sus límites.
7. Las webseries son un laboratorio de innovación de la tele del futuro. Las televisiones son cada vez menos favorables a probar nuevos formatos. Aquí las webseries emergen como una disciplina ideal para testear, afinar y lanzar los formatos ganadores de la televisión del futuro.
8. Formato cortos. Sabemos que el público de Internet no se comporta de la misma forma que cuando mira la tele (broadcast). Hiperactividad con múltiples aplicaciones y ventanas abiertas. El límite de la atención a un vídeo en Internet difícilmente supera los 7-8 minutos.
9. Ser innovador tiene un coste. La inmensa mayoría de las web series son fruto del entusiasmo y pasión de sus promotores. No suelen contar con financiación y son producciones “low cost”. Esto cambiará. Como dice Michel Reilhac “Los modelos económicos no están aquí todavía, es demasiado pronto: el sistema financiero sólo viene en su lugar cuando el riesgo se elimina. Ahora es el momento para los que arriesgan y los exploradores, que allanarán el camino para los financieros”.
10. Esperar sentado. Si no quieres correr riesgos con una webserie, puedes empezar a realizar pilotos e iniciar un (largo) peregrinaje para ver qué tele te compra algo. O esperar una subvención. O esperar que algún amigo mecenas te ponga encima de la mesa todo el dinero que necesitas para arrancar tu producción. O intentar encontrar trabajo en la construcción o en la industria del automóvil.
PD. En breve anunciamos el inicio del Web Series Festival 2011, a veces los patrocinadores se hacen rogar un poco….