El libro «La segunda carrera» (2024) de Alfonso Jiménez se centra en la planificación y disfrute de una prolongación fructífera de la vida profesional después de la jubilación. En este contexto, el envejecimiento progresivo de la población española y la mejora de la atención médica han llevado a un aumento significativo en pacientes con enfermedades crónicas y dependencia, lo que plantea desafíos para los sistemas de salud y sociales. Este libro ofrece una guía para directivos que buscan seguir aportando valor y experiencia en su segunda carrera, con oportunidades en el emprendimiento, la consultoría, la educación y la filantropía.
El envejecimiento de la población española es un fenómeno que se ha intensificado en las últimas décadas. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la esperanza de vida en España ha aumentado significativamente, pasando de 75,4 años en 1999 a 80,9 años en 2019 para los hombres, y de 82,3 años en 1999 a 86,2 años en 2019 para las mujeres. Este aumento en la esperanza de vida ha llevado a un crecimiento en el número de personas mayores de 65 años, lo que supone un desafío para los sistemas de salud y sociales.
La transición demográfica y el aumento de la esperanza de vida han generado un cambio en la estructura de la población, con un aumento en la proporción de personas mayores y una disminución en la proporción de jóvenes. Esto ha llevado a una mayor demanda de servicios sanitarios y sociales, lo que plantea desafíos para la planificación y gestión de estos servicios.
Además, el envejecimiento de la población también tiene implicaciones económicas y sociales significativas. La jubilación y los años posteriores a la retirada del mundo laboral son realidades en constante evolución, y el progresivo envejecimiento de la población española y el consiguiente aumento de la esperanza de vida ponen de manifiesto el estado de inmensa transformación de la sociedad española, así como el cambio de paradigma del modelo actual del estado de bienestar.
En este contexto, el libro «La segunda carrera» de Alfonso Jiménez ofrece una guía valiosa para directivos que buscan seguir aportando valor y experiencia en su segunda carrera, con oportunidades en el emprendimiento, la consultoría, la educación y la filantropía. El libro proporciona una brújula inspiradora que señala el abanico de oportunidades en estas áreas, analizando las características, ventajas e inconvenientes de cada una de las opciones, así como las actividades más adecuadas en cada caso y en función de las características personales.
Enfoque dinámico y cercano
Alfonso Jiménez adopta un enfoque dinámico y cercano para guiar a los directivos que han finalizado su etapa ejecutiva hacia nuevas oportunidades profesionales.
Jiménez describe su libro como una «brújula inspiradora» que ayuda a los directivos a navegar por las diversas oportunidades disponibles en su segunda carrera. Esta metáfora sugiere que el libro no solo proporciona información, sino que también motiva y guía a los lectores en su proceso de transición. La brújula simboliza orientación y dirección, elementos cruciales para quienes se encuentran en un momento de cambio significativo.
El autor presenta un abanico de oportunidades en áreas como el emprendimiento, la consultoría, la educación y la filantropía. Cada una de estas áreas ofrece diferentes formas de aportar valor y utilizar la experiencia acumulada durante la carrera ejecutiva. Jiménez analiza las características, ventajas e inconvenientes de cada opción, permitiendo a los directivos evaluar cuál se adapta mejor a sus intereses y habilidades.
Motivación y descubrimiento
El libro está diseñado para ser una fuente de motivación y descubrimiento. Jiménez entiende que la transición a una segunda carrera puede ser un proceso desafiante y, por ello, se esfuerza por inspirar a los directivos a ver esta etapa como una oportunidad para reinventarse y seguir creciendo profesionalmente.
Algunos de los elementos motivacionales son:
- Historias de éxito: Relatos de otros directivos que han tenido éxito en su segunda carrera.
- Reflexiones inspiradoras: Frases y reflexiones que motivan a los lectores a seguir adelante.
- Enfoque positivo: Un enfoque optimista que resalta las oportunidades y beneficios de la segunda carrera.
«Día Después»: Un punto de inflexión
Alfonso Jiménez aborda con profundidad el concepto del «día después», un momento crucial en la vida de un directivo que ha finalizado su carrera ejecutiva. Este punto de inflexión requiere una reflexión profunda sobre las opciones disponibles y los pasos a seguir para iniciar una nueva etapa profesional.
Jiménez comienza reconociendo que la vida ejecutiva es finita y que, inevitablemente, llega un momento en que un directivo debe enfrentarse al final de su carrera en la cúspide empresarial. Este «día después» no es solo un cambio de rol, sino un cambio significativo en la identidad profesional del directivo. Es un momento que puede generar incertidumbre y ansiedad, pero también es una oportunidad para la reinvención y el crecimiento personal.
Reflexión profunda y autoevaluación
El autor enfatiza la necesidad de una reflexión profunda sobre las opciones disponibles. Este proceso de autoevaluación incluye:
- Identificación de habilidades y conocimientos: Evaluar qué habilidades y conocimientos se han adquirido a lo largo de la carrera y cómo pueden ser aplicados en nuevas áreas.
- Análisis de intereses y pasiones: Reflexionar sobre qué actividades generan pasión e interés, y cómo estas pueden ser integradas en la nueva etapa profesional.
- Evaluación de la Red de Contactos: Considerar la red de contactos profesionales y cómo puede ser utilizada para explorar nuevas oportunidades.
Exploración de opciones
Jiménez presenta un abanico de opciones que los directivos pueden considerar para su segunda carrera. Estas opciones incluyen roles como consejero, interim manager, miembro de un consejo asesor, senior manager de un fondo, o docente. Cada opción es evaluada en términos de sus características, ventajas e inconvenientes, proporcionando un análisis detallado para ayudar a los directivos a tomar decisiones informadas.
El autor subraya la importancia de la planificación estratégica para una transición exitosa. Esto implica:
- Establecimiento de metas claras: Definir objetivos a corto y largo plazo para la nueva etapa profesional.
- Desarrollo de un Plan de Acción: Crear un plan detallado que incluya los pasos necesarios para alcanzar las metas establecidas.
- Preparación para el cambio: Desarrollar nuevas habilidades y conocimientos que sean relevantes para las nuevas oportunidades profesionales.
Jiménez destaca que la experiencia y el conocimiento acumulados durante la carrera ejecutiva son activos valiosos que pueden ser utilizados para aportar valor en la nueva etapa. La segunda carrera no solo es una continuación de la vida profesional, sino una oportunidad para contribuir de manera significativa en nuevos contextos y roles. El autor anima a los directivos a encontrar formas de mantenerse activos y relevantes, ya sea a través de actividades generadoras de ingresos o de actividades no lucrativas.
Aportar valor en la nueva etapa
El autor subraya la importancia de seguir aportando valor, sabiduría y experiencia en esta nueva fase. La segunda carrera no solo es una continuación de la vida profesional, sino una oportunidad para contribuir de manera significativa en nuevos contextos y roles.
Continuación de la vida profesional
Jiménez argumenta que la segunda carrera no debe ser vista simplemente como una continuación de la vida profesional anterior, sino como una oportunidad para reinventarse y contribuir de manera significativa en nuevos contextos y roles. Este enfoque permite a los directivos utilizar sus habilidades y experiencias acumuladas para generar un impacto positivo en diferentes áreas.
Utilización de activos acumulados
El autor destaca que los directivos poseen una serie de activos valiosos que pueden ser utilizados en su segunda carrera. Estos activos incluyen:
- Conocimientos: La experiencia y el conocimiento acumulado en la gestión y dirección de empresas.
- Experiencias: Las vivencias y aprendizajes obtenidos a lo largo de la carrera ejecutiva.
- Marca personal: La reputación y notoriedad construida en el mercado.
- Red de contactos: Las relaciones profesionales establecidas a lo largo de los años.
Estos activos pueden ser aprovechados para aportar valor en nuevos roles, como consejero, interim manager, miembro de un consejo asesor, senior manager de un fondo o docente.
Contribución significativa
El autor enfatiza que la segunda carrera es una oportunidad para contribuir de manera significativa en nuevos contextos. Esto puede incluir:
- Emprendimiento: Iniciar nuevos proyectos empresariales.
- Consultoría: Proveer asesoramiento estratégico a empresas.
- Educación: Formar a la próxima generación de líderes y profesionales.
- Filantropía: Participar en actividades no lucrativas que generen un impacto social positiva.
Beneficios personales y profesionales
Jiménez también resalta los beneficios personales y profesionales de mantenerse activo en la segunda carrera:
- Sentido de propósito: Tener una razón para levantarse cada día y sentirse útil.
- Rutinas saludables: Mantenerse activo ayuda a realizar rutinas saludables y a mejorar el bienestar general.
- Autoconfianza: La actividad profesional incrementa la autoconfianza y el sentimiento de utilidad.
- Mantenimiento de activos intangibles: Continuar desarrollando conocimientos, experiencias, marca personal y relaciones sociales.
Opciones de la segunda carrera
Jiménez explora diversas alternativas que los directivos pueden considerar para su segunda carrera profesional. A continuación, se explican con profundidad y de manera pedagógica los argumentos del autor respecto a estas opciones:
Ser Consejero
Un consejero participa en los consejos de administración de empresas, aportando su experiencia y conocimiento estratégico. Este rol permite a los directivos influir en la toma de decisiones de alto nivel y contribuir al éxito de la empresa desde una posición de asesoramiento.
Interim Manager
Un interim manager asume roles temporales de gestión en empresas que necesitan liderazgo durante periodos de transición, crisis o cambio organizacional. Este rol es ideal para directivos que disfrutan de desafíos y cambios constantes.
Miembro de un Consejo Asesor
Un miembro de un consejo asesor ofrece asesoramiento experto a empresas en crecimiento o en sectores específicos. Este rol es menos formal que el de un consejero y se centra más en proporcionar orientación estratégica y operativa.
Senior Manager de un Fondo
Trabajar como senior manager en un fondo de inversión implica utilizar la experiencia ejecutiva para gestionar inversiones y participar en la toma de decisiones estratégicas de las empresas en las que el fondo invierte.
Docente
Convertirse en docente permite a los directivos compartir sus conocimientos y experiencias en instituciones educativas, como universidades y escuelas de negocios.
Preparación y adaptación
Alfonso Jiménez, en su libro «La segunda carrera», enfatiza la importancia de la preparación y la adaptación para una transición exitosa hacia una nueva etapa profesional después de finalizar la carrera ejecutiva.
Desarrollo de habilidades
Jiménez subraya la necesidad de identificar y desarrollar nuevas habilidades que sean relevantes para la segunda carrera. Esto implica una autoevaluación para determinar qué competencias son necesarias en el nuevo rol que se desea asumir. Por ejemplo, un directivo que quiera convertirse en docente puede necesitar desarrollar habilidades pedagógicas y de comunicación.
El autor también destaca la importancia de mantenerse actualizado en el campo de interés. Esto puede incluir la realización de cursos, talleres, y programas de formación continua. La actualización de conocimientos no solo mejora la competencia profesional, sino que también aumenta la confianza y la credibilidad en el nuevo rol.
Ejemplo práctico: Un directivo que decide trabajar como consejero en una empresa tecnológica puede necesitar familiarizarse con las últimas tendencias en tecnología y ciberseguridad. Esto puede lograrse a través de cursos en línea, certificaciones y la participación en conferencias del sector.
Red de Contactos
Jiménez otorga mucha importancia a la red de contactos profesionales, ya que es crucial para acceder a nuevas oportunidades. Mantener y expandir esta red implica seguir en contacto con antiguos colegas, participar en eventos de la industria y utilizar plataformas profesionales como LinkedIn.
El autor sugiere que los directivos deben ser proactivos en enriquecer su red de contactos. Esto puede incluir la búsqueda de mentores, la colaboración en proyectos conjuntos y la participación en asociaciones profesionales. Una red de contactos sólida puede abrir puertas a nuevas oportunidades y proporcionar apoyo durante la transición.
Ejemplo práctico: Un directivo que quiere convertirse en interim manager puede beneficiarse de asistir a conferencias de gestión y liderazgo, donde puede conocer a otros profesionales y potenciales empleadores que buscan líderes temporales.
Planificación Estratégica
Jiménez enfatiza la importancia de crear un plan estratégico que guíe la transición hacia la segunda carrera. Este plan debe incluir metas claras a corto y largo plazo, así como los pasos necesarios para alcanzarlas. La planificación estratégica proporciona una hoja de ruta y ayuda a mantener el enfoque durante la transición.
El autor sugiere que los directivos deben establecer metas claras y alcanzables. Estas metas pueden ser profesionales, como obtener una certificación específica, o personales, como lograr un equilibrio entre la vida laboral y personal. Tener metas claras ayuda a medir el progreso y mantener la motivación.
Jiménez recomienda realizar un seguimiento regular del plan estratégico y hacer ajustes según sea necesario. Esto implica revisar periódicamente los objetivos y evaluar el progreso. Ser sistemático y disciplinado en el seguimiento del plan asegura que se mantenga en el camino correcto y se adapten las estrategias según las circunstancias cambiantes.
Ejemplo práctico: Un directivo que planea convertirse en senior manager de un fondo de inversión puede crear un plan estratégico que incluya obtener una certificación en gestión de inversiones, asistir a seminarios financieros y establecer contactos con profesionales del sector. El seguimiento regular del plan permitirá ajustar las estrategias según las oportunidades y desafíos que surjan.