Hace poco más de un mes este blog cumplió su 7º aniversario. Casi 1.200 post después, con épocas de post diario y algún mes sin postear, la noticia es que sigue vivo y –lo más importante- con ganas de continuar.
Por ello, toca hacer un poco de reflexión acerca de los blogs. Hace años, con la proliferación de las redes sociales, pronosticaron su decadencia y muerte. Es cierto que ha habido una adaptación. Muchos han caído, otros han nacido, muchos languidecen y algunos (bastantes diría yo) han encontrado la medida para una buena convivencia con otras opciones de comunicación y relación.
¿Por qué sigue teniendo sentido un blog?
- Permite disciplinar conocimientos y contenidos
- Porque es profundidad y reflexión
- Porque es libertad, es tuyo y nadie te lo puede quitar, ni censurar
- Representa los cimientos de la identidad digital… y de la marca personal
- Para comunicar tal cual eres, hasta el último detalle
- Porque es instinto e intuición
- “Sin un blog, eres un sin techo digital, todo el día tirado en las redes sociales” (@yoriento)
- Quien a estas alturas no tiene un blog es porque no le interesa comunicar o cree que no tiene nada que comunicar (@lagamez), o peor aún, no sabe comunicar
- Porque hace falta algo que perdure y las redes sociales son tan volátiles (@jmartinezal)
- Son una forma de vida (@isopixel)
- Ahora, más que nunca, necesitamos referentes (bloggers) independientes y críticos… con el sistema o con los anti-sistema
Entonces, si «tan importantes» son los blogs ¿Cuáles son las causas del abandono?
- Me he vaciado
- Escribo en otros sitios y el tiempo, o la inspiración, no me dan para tanto
- Sensación de que me repito permanentemente
- He cumplido mis objetivos (a corto plazo) de identidad digital/marca personal
- No tengo tiempo
- Ya no es cool. Desde luego, hay actividades menos exigentes y más efectistas para el #postureo
Algunas recomendaciones para renacer un blog:
- Darse un respiro.
- Alinearlo al máximo a tu proyecto vital… lo que no implica un streptease personal.
- El blog está a tu servicio, no tú al servicio del blog. Nuestras vidas no son líneas rectas, ni terreno llano. Haz que el blog, evolucione contigo. Si es necesario, plantéate reorientar la temática.
- Ser realista y consecuente. Tener claro que por más trabajado que esté un blog o un post, es prácticamente imposible crear contenido único y que no se haya dicho o escrito anteriormente. Por tanto, lo que lo hace interesante/atractivo es que lo cuentes a partir de tu experiencia personal y con tus propias palabras
- Para mí, ser blogger es una afición, no una obligación. Si has perdido la motivación, revisa las razones: ¿no te gusta lo que haces? No crees interesante compartir y comunicar?
- Ser sincero, y los más claro y simple posible. Lo primero estaba claro desde el primer día, lo segundo lo he aprendido con el tiempo.
- Pensar y, humildemente, intentar entregar el máximo valor al usuario
- Dejar de vender y ser fiel a compartir
¿Hasta cuándo?
- Mientras siga encendiéndose la lucecita de «esto da para un post«
- Mientras siga emocionándome al escribir un post
- Mientras tenga experiencias y conocimientos para compartir
- Mientras alguien quiera leerlo