Que “el futuro es de los contenidos”, es una afirmación que no sorprende a nadie. Si encima, quien lo dice es Martin Sorrell (presidente del grupo WPP), hay que tomárselo en serio. Hace unas semanas reinvidicaba que su visión de la comunicación no se limitaba a la publicidad…
El ejemplo más claro de Sorrell está en el mercado español, donde el grupo WPP invirtió bastante dinero en Imagina (hoy Mediapro). Una compañía que actualmente sólo controla LaSexta, los derechos de fútbol, de la fórmula 1 o el diario Público, entre otros proyectos…
Sorrell no se anda con rodeos, ni con las ambigüedades típicas de los publicitarios “entiendo la importancia de los contenidos, que son cada vez era más fundamentales en este negocio”.
Esto implica que las marcas más importantes del mercado, tienen que dibujar su propia estrategia. Algunas ya están tomando posiciones…y de lo que se trata es de hacer de la forma más diferenciada y consistente con tu estrategia de marketing.
La música es una de los contenidos por excelencia, de especial interés para aquellas marcas que quieren ganarse el favor del público joven.
Por esta razón no sorprende que Movistar, una marca relevante del mercado español (e internacional) pero que tradicionalmente ha flojeado entre la juventud, lance un sello discográfico en Internet para nuevos artistas. La noticia no es anecdótica, dado que Movistar fue la mejor marca española en 2007, según el ranking de Interbrand.
Este sello discográfico funcionará a través de la red. Lo mejor de esta iniciativa, según han explicado portavoces de Telefónica, es que tiene “vocación exclusivamente digital” y tiene la misión de dar a conocer «a nuevos talentos y artistas jóvenes«.
Desde su nacimiento hace un más de un mes «300 grupos ya han colgado su música«. La elección de los artistas se hace a partir de “la participación del usuario quien al visitar la web, a través de sus votos y descargas, les orientan sobre qué artistas tienen que promocionar”.
Para mí, lo peor de la iniciativa es su nombre “Sello Espacio Movistar” y su logotipo. No parece que haya la intención de convertirla -ni tan siquiera- en una sub-marca. Puede que la iniciativa no sea tan estratégica como parecía. Lástima, una ocasión perdida.
Desde luego, si hubieran pedido opinión a los usuarios, estoy convencido que les habría quedado mejor… al fin y al cabo, la nueva marca y los contenidos son para ellos.