El pasado viernes tuve un interesante debate en la sesión de Foxize dedicada a ‘Tu Identidad digital: diseño y ejecución‘. Una de las cuestiones de fondo, más debatida, fue en qué medida debemos mezclar el lado personal del profesional, y por supuesto, cómo hacerlo?
Desde luego no hay una respuesta buena, porque depende de muchos factores y de diversas circunstancias. No obstante -para mí- hay dos argumentos a favor de la mezcla:
- La realidad hace converger ambos entornos (presencial y digital). Somos lo que hacemos y lo que dicen que hacemos, y cada vez hacemos más cosas en la Red, y cada vez hay más pistas en la Red sobre nosotros… y muchas de ellas personales.
- El lado personal puede ser dar una oportunidad para diferenciarse. Construir nuestra identidad (digital) es tomar conciencia de nuestra singularidad y los rasgos que nos hacen diferentes. Diferenciarse es competir.
- Inconvenientes: privacidad, confidencialidad
Criterios para mezclar lo profesional con lo personal:
- La coherencia de ambos lados. En última instancia si tu lado personal no añade nada a tu lado profesional, como mínimo que no reste y coexistan pacíficamente.
- El equilibrio. ¿Qué lado debe pesar más? (50/50, 90/10,…). Dependerá del grado de relación entre ambas actividades, del momento,..
- En este debate hay dos partes. ¿La aceptación de la empresa? Quizás a nuestros clientes, al jefe o al socio, le moleste difusión de tu “otro yo”.
- Problemas: problemas contractuales, conflictos éticos, empresa “poco abierta”,…
Por qué mezclarlo:
- No somos unidimensionales. Somos fruto de nuestras experiencias profesionales y personales, escondiendo un lado, no estamos completos.
- Nuestro lado personal puede añadir o complementar valores esenciales a nuestra identidad digital.
- Las empresas necesitan humanizarse y quitar corsés a sus equipos para que se muestren como son y sumen. Las empresas necesitan sumar puntos de contactos personales creíbles y que generen confianza.
Cómo mezclarlo:
- Siendo auténtico. Somos seres imperfectos, la perfección ni existe ni es creíble. Mostrar tu lado personal debe hacerse con naturalidad. No es exhibicionismo, ni buscamos el juicio de los demás. Solo buscamos estar armonía y equilibrio entre lo que somos, pensamos, decimos y hacemos.
- Tienes que sentirte cómodo y comprometido con lo que estás haciendo.
- Construye tu propio relato. No necesitas guión, solo que sea real, mucha flexibilidad y que seas conciente que el protagonista eres tú.
Qué mostramos de nuestro lado personal
- No impliques a toda tu familia
- Tampoco tienes que hablar de todos tus hobbies y aficiones. Muéstrate tal cual, pero elige y enfoca.
- Tu hobby puede ser la literatura rusa del siglo XIX, pero si te gusta el fútbol y te alegras de la victoria de tu equipo, perfecto. Si acabas de ver tal o cual película, también. Si lo que te va es la degustación de cervezas artesanas, ídem.
- Vivir tu lado personal en “modo postureo” permanente, no te hace diferente, solo una pieza más del rebaño.
Dónde (Modelo de presencia)
- Hay quien prefiero mezclarlo (con mesura) en los mismos entornos o perfiles sociales (p.e. mismo usuario de twitter).
- Hay quien prefiere mantener ‘separado’ y a veces incluso ‘diferenciado’, el perfil profesional y otro de personal, dejando que la marca personal sea resultado de la mezcla casual entre ambos lados
La cuestión es reflexionar un poco antes de lanzarse, en un sentido u otro. Siempre hacerlo con coherencia, equilibrio, sentido común y sostenibilidad en el tiempo, recordando que la identidad digital no es un objetivo, es una estrategia.