Aunque prometí dejar de lado las disquisiciones sobre la existencia o no del “modelo Barcelona”, casualmente, ayer aparecía la noticia que el 20% de las 750 empresas surgidas en 2007 con el apoyo de Barcelona Activa las promovieron inmigrantes, un fenómeno que tiene bastante que ver con ese “no-modelo Barcelona”.
Lo de la actitud de la población extranjera, no es un fenómeno aislado. No quiero especular, ya que no lo he contrastado con ningún trabajo de campo. Sólo tomo como referencia los casos personales más cercanos que conozco: Multiplica, Nikodemo y el posgrado del Idec-UPF.
Tampoco creo que haya argumentar que los “extranjeros” son mejores o no, desde un punto de vista técnico. Ya sabemos que depende del perfil, formación, experiencia, etc… que necesariamente es heterogéneo.
En cambio, sí atrevo a aventurarme a afirmar que su actitud hacia los proyectos, compromiso y esfuerzo están -habitualmente- por encima de la media de los “autóctonos”.
No se trata de rendir pleitesía a cualquier cosa de fuera como en “bienvenido mister marshall”. Pero hay que reconocerlo y ser más inteligentes. Más bien se trata de dar las mismas oportunidades. Además, recordemos que a menudo de quienes más podemos aprender es de los que son diferentes.
Vamos, que lo de tener extranjeros en plantilla no es cuestión de exotismo, sino de puro interés de negocio. Como diría Adolf Todó: “No podemos ponerle puertas al océano, pero podemos conocerlo”. Y aprovecharnos, añadiría.
Ahora sólo falta que la Administración ponga su granito de arena y dé alguna facilidad para su contratación…
Eso o que luego no se llenen la boca con políticas a favor de la internacionalización (y creación) de compañías o a la atracción de talento foráneo…y no sólo de turismo.
¿Más razones? Puede que con la entrada de sabia fresca consigamos detener o amortiguar el descenso del número de constituciones de sociedades, que ha bajado -en España- un 3,9% en 2007 con respecto a 2006, cerca de 6.000 menos que en el año anterior.
O sea menos fronteras y por favor más talento, esfuerzo y proyectos.
¿Alguien tomará nota?